TRASPLANTE CAPILAR
Un injerto capilar, conocido también como trasplante capilar o implante capilar, puede definirse como una redistribución folicular del cuero cabelludo, en la que retiramos folículos pilosos del área donante del paciente (occipital y temporal de la cabeza, que son áreas no influenciadas por la acción genética y hormonal) para implantarlos o sembrarlos posteriormente en las áreas receptoras (áreas alopécicas o calvas) del paciente.
El injerto capilar es uno de los tratamientos más demandados en nuestra clínica capilar como tratamiento de la calvicie, tanto para la alopecia masculina como para la alopecia femenina.
Precuntas frecuentes
Todas las cuestiones más comunes en nuestros tratamientos de transplante capilar
El trasplante capilar representa la opción quirúrgica como tratamiento en diversos tipos de alopecia, en aquellos pacientes en los que han fracasado otras medidas terapéuticas, o en los que se ha producido una importante pérdida de densidad capilar.
La cirugía capilar ha evolucionado enormemente en los últimos años, siendo la técnica FUE las más empleada en la actualidad, alcanzando más del 95% de las intervenciones. Se trata de una técnica segura, que no deja cicatriz a diferencia de la técnica FUSS, realizada bajo anestesia local (en nuestra clínica existe la posibilidad de asociarla con sedación llevada a cabo por anestesiologos), y con buenos resultados, siendo fundamental una evaluación individualizada y exhaustiva de cada paciente. La misma consiste en extraer de forma individualizada las unidades foliculares de la zona donante (zona posterior y lateral del cuero cabelludo), mediante incisiones mínimas de 0.7-0,9 mm que curaran sin dejar cicatriz, para a continuación mediante microinjertos, implantarlos en la zona receptora (zona alopécica o de baja densidad capilar), marcada previamente.
La razón de extraer las unidades foliculares a trasplantar de las regiones posterior y lateral es que los folículos de esta zona son resistentes por causa genética a la acción hormonal a la que nos hemos referido con anterioridad, y que está implicada en la pérdida capilar. Es por ello, que las unidades foliculares trasplantadas no deben perderse, siempre que se sigan minuciosamente las instrucciones de cuidado postrasplente.
Para llevar a cabo esta cirugía, es preciso el rasurado del cuero cabelludo, siendo indispensable en la zona donante, y si bien facilita enormemente la intervención, no así en la zona receptora en todos los casos. En el caso concreto del trasplante capilar en mujeres, se suele llevar a cabo un rasurado en “flaps”, esto es, en segmentos rectangulares de área en función de las unidades foliculares necesarias, de tal forma que el cabello largo de áreas superiores caerá tapando la zona donante una vez finalizada la intervención.
- “El trasplante capilar FUE representa la técnica más empleada en la actualidad para llevar a cabo esta intervención; Se realiza bajo anestesia local, no deja ninguna cicatrización en manos expertas, y permite una rápida incorporación a la vida diaria”
- “La técnica de microinjertos individualizados, si bien es muy laboriosa y requiere gran precisión, ofrece unos resultados muy naturales, que son perceptibles al cabo de 10-12 meses desde la intervención”